El presidente Donald Trump autorizó a la Agencia Federal para el manejo de Emergencia (FEMA, por sus siglas en inglés) a coordinar las labores de ayuda, tras declarar el estado de emergencia en Florida, que permitirá asistir con fondos federales a los condados del extremo noroeste de la península, por el paso del huracán Sally.
Por su parte, la propia FEMA anunció la disponibilidad de asistencia federal para el Estado del Sol, a fin de complementar los esfuerzos de respuesta del gobierno estatal y local a los daños que ocasione el huracán Sally, reseñó Diario Las Américas.
Según el comunicado oficial, se proveerá asistencia federal a los condados de Bay, Escambia, Holmes, Okaloosa, Santa Rosa, Walton, Washington, Calhoun, Franklin, Gadsden, Gulf, Jackson y Liberty, todos ellos próximos la estela que sigue el huracán por la zona noroccidental del estado.
Sally tumbó árboles, inundó calles y casas, dejó sin electricidad a cientos de miles de hogares y según reportes causó también la muerte de una persona, tras golpear el miércoles con potencia de huracán el sureste de Estados Unidos y azotar la zona con lluvias torrenciales.
Sally tocó tierra como huracán de categoría 2 en Gulf Shores, Alabama, con vientos máximos sostenidos de cerca de 170 Km/hora. Desde entonces se ha degradado a tormenta tropical.
Pero esta tormenta de lento desplazamiento se quedó prácticamente detenida frente a las costas de Alabama y el noroeste de Florida, donde dejó lluvias copiosas.