Kemi Badenoch, la secretaria de Estado de Igualdad del Reino Unido, planteó recientemente su preocupación durante una sesión por lo que denominó como una “epidemia” de niños homosexuales a quienes se les induce a identificarse como transgénero, durante una reciente sesión en la Cámara de los Comunes.

El debate sobre el aumento de personas trans en países occidentales atrae la atención y preocupación de figuras destacadas de la política europea.

Posterior a estas declaraciones, la secretaria propuso ”la prohibición de la transición para menores” sin previa prescripción médica y advirtió sobre los posibles impactos formativos que en su desarrollo podría tener no imponer estos cotos legales.

“No es un acto neutral”, defendió.

LEA TAMBIÉN | Rusia declara el movimiento LGBT como una organización extremista

Asimismo, alertó sobre una suerte de “terapia de conversión” en la que los menores son dirigidos de ”forma prioritaria” hacia una vía médica con consecuencias graves, como la esterilización, de la que más adelante se podrían arrepentir.

Badenoch aseguró que hay otras formar de enfrentar a esta realidad.

La ministra solicitó la creación de una nueva guía escolar que asegure a los representantes de menores el derecho a ser consultados y que establezca regulaciones, como evitar que las niñas sean forzadas a participar en deportes con niñas trans de nacimiento masculino.

“Ningún niño nace en el cuerpo equivocado”, agregó.

La postura de Badenoch ha generado profundas divisiones en el Partido Conservador.