Si alguna vez te ha preocupado cómo garantizar que las ideas los trabajadores no se pasen por alto ni se atribuyan a la persona equivocada dentro de una organización, te tenemos una sugerencia: ¡prueba la amplificación!
En tres estudios conducidos por 4 profesores de escuelas de negocios, en los que participaron más de 2760 trabajadores, se encontró que respaldar públicamente la idea de alguien con la debida atribución de crédito puede lograr tres cosas importantes:
1. Lograr que la contribución de otra persona parezca mejor.
2. Hacer al amplificador (la persona que amplifica) quedar mejor también.
3. Ayudar a que las voces de todos sean consideradas y escuchadas.
La lección aquí parece clara: cuando animas a un compañero de equipo amplificando su idea, también consigues elevarte a ti mismo. En otras palabras, la amplificación beneficia a todos los involucrados.
Los investigadores concuerdan que la amplificación podría ser una técnica especialemente poderosa para crear unidad entre grupos con un historial de competencia, sin embargo, advierten de la posibilidad de que esta práctica resulte contraproducente, en el caso de que la amplificación dentro de un subgrupo es considerada competitiva por un subgrupo opuesto.
De cualquier forma, ser testigo de el apoyo entre colegas que existe dentro de una organización indica que esta se trata de un entorno psicológicamente seguro en el que participar y aportar nuevas ideas o soluciones para los problemas que se presenten.
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Tulia Monsalve, Directora Grupo Plus Comunicación Estratégica y profesora Universidad Monteavila @tuliamonsalve @grupoplusve
