Miami Heat tuvo una noche extremadamente negativa este miércoles en el Game 1 de las Finales ante Los Angeles Lakers. No solamente por haber perdido el encuentro de manera contundente (116-98), sino sobre todo por las complicaciones físicas que sumaron sus tres estrellas principales: Jimmy Butler fue la de menor gravedad, con una torcedura de tobillo izquierdo que no le impidió seguir jugando. Pero distinta fue la historia para Goran Dragic (desgarro en la fascia plantar izquierda) y Bam Adebayo (distensión en el lado izquierdo del cuello).
El primer reporte de lesionados de Miami para el Game 2 no trae buenas noticias: tanto Dragic como Adebayo están apuntados como doubtful (dudoso), un estatus que suele colocarse cuando hay menos chances de que el jugador sea de la partida, con respecto a la posibilidad de que termine jugando. No están descartados, pero en principio, es difícil que los veamos en el campo.
“Es una lesión diferente que su lesión previa. Es en el mismo lado, por lo que es fácil compararlas, pero se trata de una lesión diferente”, sostuvo este jueves Erik Spoelstra sobre Adebayo, agregando luego sobre los posibles cambios en la alineación titular: “No es que los jugadores que puedan entrar en la rotación no hayan jugado antes. Ellos tienen confianza y han jugado roles grandes para nosotros durante todo el año. La profundidad es una de nuestras fortalezas más importantes. La hemos utilizado durante todo el año. Vamos a ver mañana quién está disponible y hacer los ajustes de acuerdo a eso”.
Esos posibles ingresos a la rotación son los de Kendrick Nunn y Kelly Olynyk, quienes no venían teniendo minutos jugaron durante buena parte del segundo tiempo. El canadiense no tuvo una actuación demasiado destacada, pero Nunn abrió algunos ojos, anotando 18 puntos en 21 minutos con un 8-11 de cancha. ¿Lo hizo con el partido definido? Sí, pero al menos mostró una versión bastante mejorada a la que traía en Disney y prendió una luz de esperanza de cara a un mayor protagonismo.