La guerra entre Israel y el grupo terrorista Hamás ha dejado graves consecuencias en la franja de Gaza. Por esa razón, la Organización de Naciones Unidas ha pedido mejor protección para los trabajadores humanitarios que hacen labores en la zona.
Luego de varios meses de enfrentamiento, el Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas, integrado por 15 miembros, ha hecho énfasis en la necesidad de que aumenten la seguridad de los trabajadores humanitarios.
En especial aquellos que están en zonas de riesgo y enfrentan peligros significativos.
El jefe de ayuda de la ONU, Martin Griffiths, aplaudió la decisión. Además, destacó el grave impacto de las operaciones militares de Israel en la ciudad de Rafah, en el extremo sur de Gaza.
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“La incursión terrestre en Rafah ha desplazado a más de 800.000 personas, que huyeron una vez más temiendo por sus vidas y llegaron a zonas sin refugio adecuado, letrinas y agua potable”, dijo Griffiths en una declaración escrita el viernes.
En la declaración, añadió: “Con la adopción hoy de la Resolución 2730 del Consejo de Seguridad que pide la protección de los trabajadores humanitarios y la orden de la Corte Internacional de Justicia de abrir el cruce de Rafah para proporcionar ayuda a gran escala y detener la ofensiva militar allí, este es un momento de claridad”.
La guerra entre Israel y Hamás ha generado preocupación en el mundo, debido a la escalada de violencia que ha supuesto en esta parte del mundo.
Además de esto, varios líderes mundiales han intentado mediar en la situación. Sin embargo, no ha habido avances tan importantes.
