El exprisionero político y dirigente opositor Leopoldo López abandonó la Embajada española en Caracas, en donde se mantenía en calidad de huésped desde el 30 de abril del 2019.
Así lo han confirmado a distintos medios fuentes opositoras en la frontera de Colombia y Venezuela, por donde además López habría escapado camino a Bogotá, para posteriormente dirigirse a España donde se mantiene exiliada su familia.
El Servicio Bolivariano de Inteligencia (Sebin) se mantiene desplegado en las inmediaciones de la embajada española.
El dirigente, se estableció en la Embajada de España tras el fracaso de la rebelión militar del 30 de abril de 2019 contra el líder del régimen, Nicolás Maduro. Ese día López fue liberado fue liberado en horas de la madrugada de su arresto domiciliario por funcionarios del Sebin, dirigidos por del general Cristhoper Figuera.
López había permanecido tres años y medio en una cárcel militar denominada ”Ramo Verde” y otros 21 meses en su hogar de Caracas, gracias a una medida arresto domiciliario. Fue condenado por incitación pública a la violencia por aproximadamente 14 años de cárcel en un juicio dictado por el régimen, como reconoció el propio fiscal de la causa, Franklin Nieves.
A principios de junio del 2019, su esposa Lilian Tintori huyó a Europa con el resto de la familia de López, en lo que el Gobierno de España definió como “un ejercicio de su libertad de movimiento”. Actualmente su familia permanece en Madrid, incluido su padre, Leopoldo López Gil.
El presidente (E) de Venezuela, Juan Guaidó, aún no se ha manifestado respecto al hecho y durante la huida de López, se encontraba en un evento en el céntrico del estado Miranda.
En su última declaración el jueves 22 de octubre, a través de sus redes sociales, el líder de Voluntad Popular y Activista Político, felicitó a la oposición bielorrusa por el Premio Sajarov y aprovechó para parafrasear a Desmond Tutu, premio Nobel de la Paz: “Si eliges ser neutral en situaciones de injusticia, has elegido el lado del opresor”.
Con información de La Nación, El Mundo, EFE.