John Paulson fue demandado por su antiguo socio comercial en Puerto Rico, Fahad Ghaffar, quien alega que el multimillonario de los fondos de cobertura hizo afirmaciones fraudulentas para convencerlo de invertir $17 millones en un concesionario de automóviles de lujo en la isla.
Ghaffar presentó una demanda por unos $50 millones en daños el miércoles en un tribunal federal de Puerto Rico, alegando “fraude y engaño”.. Afirma que Paulson le dijo en febrero de 2022 que invertiría su dinero en un billete convertible que eventualmente le daría 50% de propiedad del concesionario, F40, que un fideicomiso de la familia Paulson acababa de comprar por 103 millones de dólares.
La demanda se produce aproximadamente un mes después de que Paulson reorganizara sus operaciones en Puerto Rico y sacara a Ghaffar del cuerpo ejecutivo de la empresa.
En un comunicado de prensa, Ghaffar aseguró que, aparte de las alegaciones judiciales, “es altamente probable que Paulson también sería demandado en Nueva York, por desarrollos adicionales y empresas como el Vanderbilt, La Concha, St. Regis y otros desarrollos; por cerca de $300 millones adicionales”.
Paulson no es un beneficiario de la Ley 60 que concede tasas contributivas a los inversionistas que, como Ghaffar, se muden a la isla, pero ha hecho inversiones multimillonarias en Puerto Rico en distintas industrias.
En el texto, Ghaffar consigna que la exesposa de Paulson, Jenny, ha hecho “serias imputaciones de fraude en los activos de la sociedad legal de gananciales” como parte del proceso de divorcio y división de bienes que tiene la expareja.
“En esa demanda, al igual que en esta, se establece que el señor Paulson ha recurrido a ocultar dinero de los fideicomisos para mantener sus activos, que han mermado drásticamente en los pasados años”, añade.
Aunque no lo ata específicamente a ninguna de las alegaciones en su demanda, Ghaffar también menciona en su reclamación al tribunal que el banco Goldman Sachs tuvo que pagar al gobierno federal una multa de $50 millones por un fraude en un instrumento que Paulson les pidió que diseñaran para él poder beneficiarse de la pérdida de valor de ciertos activos.
Añade que la empresa financiera de Paulson, Paulson & Co., manejó en su momento activos por $30,000 millones, “pero subsiguientemente ha sufrido pérdidas sustanciales” y que en 2020 la misma se convirtió en un grupo que solo manejaba los activos del propio Paulson y no capital de otros inversionistas.
Paulson responde las acusaciones
Rafael Cedeño, vicepresidente ejecutivo de Paulson Puerto Rico, respondió en declaraciones escritas que la demanda “es un intento infundado de desviar la atención de la grave conducta que ha cometido Fahad”.
Y agrega: “Estamos llevando a cabo una investigación independiente para documentar completamente estos casos. Presentaremos una demanda que mostrará numerosos casos de mala conducta, malversación de fondos, fraude y autocontratación que lo involucran a él mismo, a sus familiares y asociados en casi todas las entidades de Paulson en Puerto Rico”.
Asimismo, Cedeño destaca que el demandante fue despedido con causa justificada de la empresa.
“Fahad fue un ejecutivo de Paulson PRV y fue despedido, con causa justificada, el 31 de julio. Fahad no tiene ninguna responsabilidad en Paulson PRV ni en ninguna de sus afiliadas”.
Paulson vs Gaffar
Ghaffar es una de las figuras principales en el pliego acusatorio federal contra la exgobernadora Wanda Vázquez Garced y el banquero Julio Herrera Velutini. Fue en la boda de Ghaffar, identificado como Individuo C, que comenzó la conspiración que se imputa en ese caso para que el banquero pagara gastos de campaña primarista de la exgobernadora a cambio de que este despidiera a un comisionado de Instituciones Financieras y designara a otro que el banquero quería.
En los hechos de la acusación queda claro que Ghaffar tenía comunicaciones directas tanto con la exgobernadora como con el banquero relacionadas al esquema, pero el inversionista no fue acusado.
La demanda de Ghaffar llega poco más de un mes después de que Paulson lo eliminara de todas las posiciones que tenía en sus negocios en la isla, le prohibió recibir trato preferencial en las propiedades que maneja y dictó a sus empleados que nadie se podía comunicar con él.
Además de a Paulson personalmente, Ghaffar demandó a Paulson 2009 Family Trust, un fideicomiso que supuestamente el financiero estableció para beneficio de sus hijos, y Paulson PRV Holdings LLC (PRV), “que fue creada como un vehículo a través del que Paulson conduciría ciertos negocios basados en Puerto Rico”.