El actor de “That ’70s Show”, Danny Masterson, fue llevado esposado desde una sala de audiencias en Los Ángeles el miércoles y podría enfrentar una sentencia de 30 años a cadena perpetua después de que un jurado lo encontrara culpable de dos de los tres cargos de violación en su segundo juicio, en el cual la Iglesia de la Cienciología desempeñó un papel central.

La esposa de Masterson, la actriz y modelo Bijou Phillips, jadeó cuando se leyó el veredicto y lloró cuando lo llevaron bajo custodia, mientras un grupo de familiares y amigos que se mantuvo impasible detrás de él durante ambos juicios.

El jurado de siete mujeres y cinco hombres llegó al veredicto después de deliberar durante siete días repartidos en dos semanas. No pudieron llegar a un veredicto en el tercer cargo, que alegaba que Masterson violó a una novia de largo tiempo. Votaron 8-4 a favor de la condena.

Masterson, de 47 años, permanecerá detenido sin fianza hasta que se dicte sentencia. No se ha establecido una fecha de sentencia.

“Estoy experimentando una compleja gama de emociones: alivio, agotamiento, fuerza, tristeza, sabiendo que mi abusador, Danny Masterson, enfrentará la responsabilidad por su comportamiento criminal”, dijo una de las mujeres, a quien Masterson conocía como miembro de la iglesia y fue condenada por violarla en su hogar en 2003, en un comunicado.

Una segunda mujer, una exnovia, cuyo caso dejó al jurado en un punto muerto, dijo en el comunicado: “Aunque estoy alentada de que Danny Masterson enfrentará algún castigo penal, estoy devastada de que haya eludido la responsabilidad penal por su repugnante conducta hacia mí”.

Un portavoz de Masterson declinó hacer comentarios, pero sus abogados casi con seguridad apelarán.

Después de que un jurado en punto muerto llevó a un juicio nulo en diciembre, los fiscales volvieron a enjuiciar a Masterson, alegando que drogó y violó a tres mujeres en su hogar en Hollywood Hills entre 2001 y 2003. Dijeron que utilizó su prominencia en la iglesia, donde las tres mujeres también eran miembros en ese momento, para evitar consecuencias durante décadas.

“Queremos expresar nuestro agradecimiento a las tres mujeres que se presentaron y compartieron valientemente sus experiencias”, dijo el fiscal del condado de Los Ángeles, George Gascón, en un comunicado después del veredicto del miércoles.

Masterson no testificó y sus abogados no llamaron a ningún testigo. La defensa argumentó que los actos fueron consensuados e intentó desacreditar las historias de las mujeres destacando cambios e inconsistencias a lo largo del tiempo, lo que, según ellos, mostraba signos de coordinación entre ellas.

“Si deciden que un testigo mintió deliberadamente sobre algo en este caso”, dijo el abogado de la defensa Philip Cohen a los miembros del jurado, repasando sus instrucciones en su argumento final, “deberían considerar no creer nada de lo que ese testigo diga”.

La Iglesia de la Cienciología desempeñó un papel significativo en el primer juicio, pero posiblemente un papel aún más grande en el segundo. La jueza Charlaine F. Olmedo permitió testimonio de expertos sobre la política de la iglesia de un ex funcionario de liderazgo de la Cienciología que se ha convertido en un prominente oponente.

La iglesia dijo en un comunicado después del veredicto que “la introducción de la religión en este juicio fue una violación sin precedentes de la Primera Enmienda y afecta los derechos del debido proceso de todos los estadounidenses. La Iglesia no fue parte en este caso y la religión no pertenecía a este procedimiento, como ha mantenido la jurisprudencia de la Corte Suprema durante siglos”.

Las tensiones fueron altas en la sala de audiencias entre los cientólogos actuales y anteriores, e incluso se filtraron en el testimonio, con las denunciantes diciendo en el estrado que se sintieron intimidadas por algunos miembros en la sala.

La actriz Leah Remini, una ex miembro que se ha convertido en la crítica más destacada de la iglesia, estuvo presente en el juicio en ocasiones, poniendo su brazo alrededor de una de las denunciantes para consolarla durante los argumentos finales.

Remini dijo en Twitter que los dos veredictos de culpabilidad en el nuevo juicio son “un alivio. Las mujeres que sobrevivieron a la depredación de Danny Masterson son heroínas. Durante años, ellas y sus familias han enfrentado ataques viciosos y acoso por parte de la Cienciología y del bien financiado equipo legal de Danny”, escribió. “Sin embargo, siguieron adelante, decididas a buscar justicia”.

El presunto acoso es objeto de una demanda civil presentada por dos de las denunciantes.

La declaración de la Cienciología dijo que “no hay ni una pizca de evidencia que respalde las escandalosas acusaciones de que la Iglesia acosó a las denunciantes”.

Fundada en 1953 por L. Ron Hubbard, la Iglesia de la Cienciología tiene muchos miembros que trabajan en Hollywood. El juez mantuvo límites en cuanto a cuánto podían hablar los fiscales sobre la iglesia y principalmente les permitió explicar por qué las mujeres tardaron tanto en acudir a las autoridades.

Las mujeres testificaron que cuando informaron a los funcionarios de la iglesia sobre Masterson, se les dijo que no habían sido violadas, que ellas mismas fueron sometidas a programas de ética y que se les advirtió que no denunciaran a un miembro de tan alto rango a las fuerzas del orden.

“Fueron violadas, fueron castigadas por ello y fueron objeto de represalias”, dijo el fiscal adjunto Reinhold Mueller a los miembros del jurado en su argumento de cierre. “La Cienciología les dijo que no hay justicia para ellas”.

La iglesia calificó el “testimonio y las descripciones de las creencias de la Cienciología” durante el juicio de “uniformemente falsos”.

“La Iglesia no tiene una política que prohíba o desanime a los miembros de denunciar conductas criminales de nadie”

El veredicto de culpabilidad en el caso de Danny Masterson marca un hito en un prolongado proceso legal que ha involucrado a figuras destacadas de Hollywood y a la Iglesia de la Cienciología. Las valientes denunciantes, quienes compartieron sus impactantes experiencias en el estrado, han buscado justicia durante mucho tiempo. A medida que el actor enfrenta la posibilidad de una larga pena de prisión, este caso ha arrojado luz sobre las complejidades de los casos de abuso sexual y ha planteado preguntas sobre el papel de las instituciones poderosas en la protección de sus miembros. El legado de este juicio seguirá siendo discutido en los años venideros, mientras se espera que la apelación y las implicaciones más amplias en la sociedad arrojen nueva luz sobre los desafíos que enfrentan las víctimas de abuso y el sistema judicial en general.