Una de las tiradoras mexicanas, Alejandra Cervantes, fue despojada simbólicamente de su medalla de bronce y entregada a la cubana Laina Pérez, quien había ocupado el cuarto puesto, dentro de la modalidad de pistola de aire a 10 metros en los Juegos Centroamericanos y del Caribe.

Pero la reglamentación de Centro Caribe Sports, prohíbe que un mismo país se lleve las tres medallas disponibles en una prueba, como era el caso.

Las atletas cubana y mexicana muestran respeto al deporte

La mexicana aceptó el cambio de medalla de manera respetuosa y mostró comprensión hacia la situación. Por otro lado, la cubana rechazó el bronce y criticó la regla, considerándola injusta y sin justificación. Ambas atletas demostraron un gran sentido de fair play y respeto hacia la competencia.

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Este episodio ha dejado una lección y ha generado un debate sobre posibles cambios en las reglas para evitar situaciones similares en el futuro. Algunos sugieren que se podrían entregar dos medallas de bronce, al tercer y cuarto lugar, para evitar que un país ocupe todo el podio.

“Sentí muy feo, porque ya había estado en la premiación y tenía la medalla, aunque es algo protocolario me parece un poquito absurdo”, dijo Cervantes el miércoles.

“Quien hizo el reglamento no fue atleta y si lo fue, ya se le olvidó, pues es injusto que quien se la gana en competencia no se la pueda llevar a su casa. No tiene ninguna justificación, es absurdo… La medalla no es mía, es de ella”, agregó Pérez.