El Producto Interno Bruto (PIB) de Perú durante el segundo trimestre se redujo a 30,2 % a propósito de las medidas para contener la propagación de la covid-19.
El cierre provisional de las fronteras, limitaciones a las actividades económicas, aislamiento social obligatorio, por pàrte del gobierno de Martín Vizcarra, generaron un aumento del desempleo y disminución de la economía, por lo que la demanda interna y externa se vio afectada.
El Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI) aseguró en su informe que “la demanda interna se contrajo en -27,7 % explicado por la reducción de sus componentes: gasto de consumo de las familias (-22,1 %), gasto de consumo del gobierno (-3,2 %) e inversión bruta fija (-57,7 %). De otro lado, las exportaciones e importaciones disminuyeron en -40,3 % y -31,3 %, respectivamente”.
Ante la baja de los ingresos de trabajadores formales e informales, el gasto de consumo de las familias se redujo en -22,1 %, especialmente en alimento, servicios y bienes no duraderos.
En ese sentido, el INEI explicó que “las exportaciones de bienes y servicios se redujeron en -40,3 %, explicado por la menor demanda externa de productos tradicionales y no tradicionales que disminuyeron en -38,6 % y -34,9 %, respectivamente. El volumen de las importaciones descendió en -31,3 % por las menores compras en bienes de consumo (-37,0 %), bienes de capital y materiales de construcción (-35,6 %) y de materias primas y productos intermedios (-22,7 %)”.