El artista disidente cubano Luis Manuel Otero Alcántara aseguró que se encuentra debilitado, tras pasar cinco días en huelga de hambre para denunciar el despojo de sus obras por parte de elementos de seguridad.

“Estoy apostando por la vida, este es mi quinto día de hambre y de sed, la noche de anoche ya me sentía con apretación en el pecho”, dijo en Facebook Otero, líder del contestatario Movimiento San Isidro (MSI), considerado por el gobierno cubano como un grupo financiado por Estados Unidos.

Anamely Ramos, miembro del MSI, informó a su vez que Otero Alcántara se encuentra “estable pero muy debilitado”. La activista dijo a la AFP a través de un mensaje de WhatsApp que el miércoles por la noche pudo hablar con él.

El disidente cubano, Otero Alcántara vive su huelga solo en su domicilio, ubicado en una calle del empobrecido barrio de San Isidro en La Habana Vieja, donde se atrincheraron los integrantes y simpatizantes del MSI en noviembre pasado.

Ese hecho dio lugar a una manifestación de 300 artistas e intelectuales el 27 de noviembre para pedir libertad de expresión, algo inédito en la isla.

“Yo no quiero verme muerto en un calabozo por dos personas que mandaron para que me molieran a golpes”, dijo en la transmisión de Facebook en la que luce demacrado y que, explicó, hizo gracias a que logró tener conexión de manera momentánea.

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El sábado pasado el disidente cubano fue recluido en un calabozo con dos hombres que lo amenazaron toda la noche, denunció.

La calle Damas, donde está su casa, se encuentra custodiada por una decena de agentes de seguridad vestidos de civil, así como por dos patrullas en cada esquina y unos seis uniformados, constató el jueves una periodista de AFP.

“Detenciones arbitrarias”

Nadie ha podido ingresar a su domicilio, incluidos dos sacerdotes que trataron de visitarlo para vigilar su estado de salud, indicó Ramos. 

Antes de declararse en huelga, el artista disidente tenía varios días saliendo a denunciar el despojo de sus obras, luego de que hace dos semanas un grupo de personas afines al gobierno entraran a su casa para arrancar de las paredes los carteles que había pintado. 

Se llevaron las obras hechas bola entre las manos, mientras un grupo de policías lo detenía a él y a una amiga que lo acompañaba.

El estatal Noticiero Nacional de Televisión dijo a principios de abril que el movimiento San Isidro y Otero pretenden hacer una manipulación política y que están financiados por el centro de reflexión Instituto Nacional Demócrata, con sede en Washington, que dirige la exjefa de la diplomacia estadounidense Madeleine Albright.

Desde hace meses, el MSI, integrado por artistas, intelectuales y periodistas independientes, mantiene un intenso activismo en redes sociales para exigir libertad de expresión en su país. 

“Nos preocupan informes sobre detenciones arbitrarias y la violación de los derechos de los cubanos a reunirse, expresarse y a su libertad de movimiento”, dijo el jueves en Twitter Julie Chung, titular interina de la Oficina de Asuntos del Hemisferio Occidental del Departamento de Estado de Estados Unidos. 

El miércoles, Amnistía Internacional denunció también en Twitter la situación del disidente Otero. “¡Basta de acoso contra activistas!”, demandó la ONG con sede en Londres.

Miembros del MSI enfrentan acoso policial constante afuera de sus casas, que les impide muchas veces salir de sus domicilios, así como la interrupción del internet y detenciones provisionales cuando salen a la calle.

Este jueves se habían propuesto salir a protestar por la situación de Otero Alcántara, pero al menos cinco disidentes cubanos fueron detenidos, dijo Ramos. El miércoles otras dos integrantes fueron también aprehendidas, denunció el MSI.