Este viernes, el juez Alexandre de Moraes, del Tribunal Supremo de Brasil, ordenó la suspensión de la red social X, perteneciente al magnate Elon Musk. Esto en represalia por no designar, en un plazo de 24 horas, un representante legal de la plataforma en Brasil.
El juez tras firmar la sentencia dijo que la Agencia Nacional de Telecomunicaciones tiene ahora 24 horas para aplicarla. Además, las tiendas ‘on line’ de Apple y Google deberán retirar la aplicación de X en un máximo de cinco días.
En opinión del magistrado, la plataforma está siendo además “instrumentalizada” por “grupos extremistas” mediante la “masiva divulgación de discursos nazis, fascistas, antidemocráticos y de odio” en vísperas de las elecciones municipales, que se celebrarán en octubre.
Todo este embrollo empezó meses atrás, después de que el juez ordenara la eliminación de una serie de perfiles por supuestamente desinformar, y Musk se negara a hacerlo, acusando al juez de actuar sin un motivo aparente y de forma sigilosa.
Entre las sanciones decretadas por De Moraes está la imposición de multas diarias de hasta 50.000 reales (unos 9.000 dólares) contra las personas o empresas que utilicen medidas alternativas para sortear la prohibición y acceder a X.
Musk ha ido en las últimas horas contra el magistrado, con mensajes en los que le ha tachado de “dictador” y de “criminal de la peor calaña”. El empresario considera que el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, es “su perrito faldero”.