domingo, noviembre 24, 2024
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Investigación señala supuestos vínculos de López Obrador con el narcotráfico; el presidente de México lo niega

El presidente mexicano califica las acusaciones como "calumnias" y exige a la DEA aclarar la situación

El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ha negado enérgicamente las recientes acusaciones surgidas de una investigación que sugiere posibles vínculos entre su campaña electoral de 2006 y el narcotráfico. La investigación, llevada a cabo por medios internacionales como ProPublica, Deutsche Welle e InSight Crime, alega que el Cartel de Sinaloa habría aportado entre 2 y 4 millones de dólares a la campaña electoral de López Obrador en ese año.

Durante su conferencia matutina, López Obrador rechazó las acusaciones, calificándolas como “viles calumnias” y destacando la falta de pruebas concretas. “No hay ninguna prueba. Son unos viles calumniadores”, expresó el mandatario mexicano. Afirmó que no iniciará un juicio contra los medios que llevaron a cabo la investigación, pero instó a la Administración para el Control de Drogas (DEA) a presentar evidencia concreta y aclarar la situación.

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La investigación sugiere que la DEA habría obtenido “pruebas sólidas” de la relación entre el Cartel de Sinaloa y la campaña de López Obrador, incluyendo grabaciones de audio y testimonios de testigos. Sin embargo, no se ha establecido si el presidente estaba al tanto de estas supuestas donaciones de narcotraficantes.

En su respuesta, López Obrador cuestionó la ética de las agencias estadounidenses al permitir prácticas que considera inmorales. “Tiene que decir la DEA si es cierto, o no es cierto, cuál es la investigación que hicieron, cuáles son sus pruebas”, declaró el presidente, instando al Departamento de Estado a esclarecer los informes que involucran a la agencia antidrogas.

El mandatario también sugirió que las acusaciones podrían estar vinculadas a las próximas elecciones en Estados Unidos y México. La investigación ha desatado polémica en medio de un ambiente político tenso, y López Obrador espera una respuesta clara de la DEA para desacreditar las acusaciones en su contra.

Este episodio plantea preguntas sobre la relación entre la política y el crimen organizado en México, así como sobre la veracidad de las acusaciones presentadas por los medios internacionales. La situación probablemente continuará generando controversia y debate en los próximos días.

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