La exgobernadora Wanda Vázquez Garced solicitó al tribunal federal que separe el juicio en su contra de los cargos que enfrenta el banquero Julio Herrera Velutini por intentar sobornar al gobernador Pedro Pierluisi.

La representación legal de la exgobernadora formalizó, por medio de una moción, su reclamo para que el tribunal separe del caso los cargos criminales 5, 6 y 7 –conspiración, soborno y fraude electrónico- relacionados con una segunda conspiración que solo implica a uno de los coacusados: el banquero venezolano Julio Herrera Velutini.

“La conspiración #1 es un supuesto esquema de soborno relacionado con la campaña primarista de Vázquez Garced de 2020 para la gobernación de Puerto Rico. En términos generales, el Ministerio Público alega que durante este periodo de campaña Vázquez Garced acordó despedir al comisionado de la Oficina de Instituciones Financieras (OCIF, George Joyner) y nombrar un nuevo comisionado elegido por Herrera a cambio de ‘financiamiento en apoyo de la campaña electoral de Vázquez’”, resume la moción.

Y agrega: “La conspiración #2 es un esquema de soborno separado, que supuestamente comenzó un año después de que terminara la primera conspiración, en la que Herrera, John Blakeman y Frances Díaz conspiraron entre sí para sobornar al Funcionario Público A (Pierluisi) ‘con apoyo político financiero a cambio de… dirigir y ejercer influencia sobre ciertos funcionarios públicos de la OCIF en beneficio de Herrera’”.

Los abogados de la exgobernadora enfatizaron en que “no hay alegación en común que una ambas conspiraciones”.

Señalaron que “los únicos vínculos aparentes” de ambos esquemas son la figura de Herrera Velutini y que, supuestamente, pretendían influenciar la OCIF “para beneficio de Herrera”.

Asimismo, apuntaron que en el pliego acusatorio no hay ningún hecho de una conspiración que se relacione con la de otra. También observaron que, “con excepción de Herrera”, la acusación no alega que los coacusados Vázquez Garced y Mark Rossini supieran de la segunda conspiración.

“Así que las dos conspiraciones, por ende, deben separarse. Es decir, los cargos 5 al 7 (que solo acusan a Herrera Velutini) deben ser separados de los cargos 1-4″ que comparten los tres acusados”, argumentó.

Por su parte, la defensa del exagente del Negociado Federal de Investigaciones (FBI, en inglés) Mark Rossini, quien es la otra persona implicada en la presunta conspiración para ofrecer dinero para apoyar la campaña de la exlíder del Partido Nuevo Progresista (PNP) a cambio del despido de George Joyner del cargo de comisionado de la Oficina del Comisionado de Instituciones Financieras (OCIF), se unió al reclamo para separar las conspiraciones al destacar que este afectaría la posibilidad de lograr un juicio justo.

“Nada en la acusación indica que los cargos separados sean parte de un ‘plan o esquema único’”, afirmó la defensa de Rossini.

Señaló que la expresidenta de Bancrédito, Frances Díaz, y el asesor político John Blakeman ya se declararon culpables y declararán como testigos mayormente en relación a la segunda conspiración contra Herrera Velutini, además de otra prueba que no tiene nada que ver con la primera conspiración.

“Es imperativo reconocer que la conspiración 2 fue un resultado directo de la insistencia del Ministerio Público en que la conspiración 1 era de naturaleza criminal. Su incapacidad para encontrar evidencia directa de un crimen en la conspiración 1 los llevó a idear las circunstancias que se convirtieron en conspiración 2″, sostuvo la moción de Rossini, firmada por los abogados Lydia Lizarribar Masini, Michael B. Nadler y Juan J. Michelen.

“La consideración por parte de un jurado de pruebas categóricamente inadmisibles es manifiestamente perjudicial e injusta porque existe un riesgo sustancial de que impida al jurado emitir un juicio confiable”, acotó.