El jefe del grupo mercenario Wagner, Yevgeny Prigozhin, viajaba en un avión que se estrelló en Rusia este miércoles y en el que murieron las 10 personas que iban a bordo.
Prigozhin,se encontraba en la lista de pasajeros, según Rosaviatsia, la autoridad local de aviación.
“Se ha abierto una investigación sobre el accidente del avión Embraer ocurrido esta noche en la región de Tver. Según la lista de pasajeros, entre ellos figura el nombre y apellido de Yevgeny Prigozhin“, agregó.
El Ministerio de Emergencias dijo que todos -pasajeros y tripulación- murieron.
El jet Embraer viajaba del aeropuerto Sheremetyevo de Moscú hacia San Petersburgo, en Rusia y se estrelló menos de 30 minutos después del despegue, informó Tass.
Prigozhin, un magnate muy franco, construyó la fuerza paramilitar que ha combatido de parte de Rusia en Ucrania y África. Hace dos meses, frustrado con el liderazgo militar de su país, incitó a una rebelión, un motín que supuso una seria amenaza para el gobierno del presidente Vladimir Putin.
El comandante y cofundador de Wagner, Dmitry Utkin, también aparece entre los que viajaban en el avión estrellado, según la lista.
Grey Zone, un canal de Telegram que se cree vinculado a Wagner, dijo que tanto Prigozhin como Utkin murieron “como resultado de las acciones de los traidores de Rusia”.
Horas antes, Grey Zone informó que el avión fue derribado por militares rusos en la región de Tver, al norte de Moscú. No mostró pruebas de sus afirmaciones.
“Un traidor” al Kremlin
Prigozhin, de 62 años, encabezó un fallido motín contra las fuerzas armadas rusas en junio, después de que el Grupo Wagner fuera aliado del Kremlin en la invasión a Ucrania, donde sus mercenarios combatieron junto a los soldados rusos.
“Está claro que ha sido un traidor”, le dijo a la BBC Orysia Lutsevich, directora del programa sobre Rusia y Eurasia en el centro de estudios británico Chatham House.
“Parece que pagó un precio por ello”, añadió.
Prigozhin fundó Wagner en 2014 y ahora cuenta con unos 25.000 combatientes.
El grupo ha estado activo en Ucrania, Siria y África occidental, y se ha ganado una reputación por su brutalidad.