En un inesperado giro de los acontecimientos, el abogado Christopher Clark, que representaba a Hunter Biden en sus asuntos legales, renunció a continuar la defensa de su cliente, aduciendo que su meta es ser testigo a favor del hijo del presidente, informó el diario Nuew York Times.
Clark había estado al frente del equipo legal de Hunter Biden mientras este se enfrentaba a diversas controversias y acusaciones en relación con sus actividades comerciales y financieras. Desde las acusaciones de posibles conflictos de interés hasta los vínculos con empresas extranjeras, la presión sobre Hunter Biden y su equipo legal ha sido constante.
Según la información del diario estadounidense, el abogado renuncia bajo el argumento que Hunter Biden lo necesitará como testigo para demostrar que el Departamento de Justicia está tratando de retirarse de un acuerdo legalmente vinculante destinado a poner fin de manera definitiva a la investigación federal.
“Basado en los acontecimientos recientes, parece que la negociación y redacción del acuerdo de declaración y un acuerdo paralelo serán disputados, y el Sr. Clark es un testigo perceptivo de esos problemas”, dijo un nuevo abogado del hijo del presidente en una moción presentada en una corte federal en Delaware el martes, revela el diario.
Se trataría de Abbe Lowell, un veterano que ha representado a una amplia gama de clientes, incluido el yerno del expresidente Donald Trump, Jared Kushner, que presentó documentos judiciales como el nuevo representante de Hunter Biden en el caso.
Hunter Biden le dijo a la jueza Maryellen Noreika que el Departamento de Justicia estaba tratando de retractarse de una parte importante del acuerdo y le pidió que lo hiciera cumplir.
Los republicanos han criticado el acuerdo como demasiado favorable para al hijo del presidente. Mientras tanto, Hunter Biden le dijo a una corte federal el lunes que su posición es que aún sigue en pie y que piensa acatarlo.
Investigación a Hunter Biden
Biden enfrenta una investigación por dos delitos federales por evasión de impuestos y posesión ilegal de un arma, en un caso que también apunta al Departamento de Justicia con señalamientos de promover una pesquisa viciada, con interferencias políticas, y de ir “despacio” en la investigación para que se agotaran los plazos de algunos posibles cargos.
El hijo del presidente aceptó declararse culpable de dos cargos menores de evasión fiscal derivados de su lucrativo trabajo de “consultoría” en nombre de empresas en Ucrania y China durante un período en que su padre era el vicepresidente de la administración de Barack Obama. Pero el acuerdo quedó en nada por la oposición de una jueza.
Presionado por las críticas y por la supuesta aplicación de la justicia de manera parcial en beneficio del hijo del presidente, el secretario del Departamento de Justicia, Merrick Garland ascendió el pasado 11 de agosto a fiscal especial a la persona que investigaba los casos.
