La primera etapa del puertorriqueño Kiké Hernández con los Dodgers de Los Ángeles fue sumamente exitosa. Se convirtió en un favorito de los fanáticos a lo largo de los años y finalmente ganó una Serie Mundial en su última temporada en 2020.
Los Dodgers ahora se arriesgan a que su segundo período sea igual de exitoso. El martes, los Dodgers completaron un canje de tres jugadores con los Medias Rojas para adquirir a Hernández, enviando a los diestros Nick Robertson y Justin Hagenman.
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“Estamos emocionados de tener a Kiké de vuelta aquí”, dijo el mánager de los Dodgers, Dave Roberts. “Obviamente nos ayudó a ganar un campeonato y tuvo sus mejores años aquí con el uniforme de los Dodgers. Sé que los fanáticos están emocionados. Tiene una gran relación con los fans”.
Hernández quiere volver a sus mejores tiempos
Como dijo Roberts, el boricua, de hecho, tuvo sus mejores temporadas como miembro de los Dodgers, pero ha tenido problemas en las últimas dos temporadas. La campaña de 2023 ha sido la más desafiante de su carrera, al menos hasta este momento.
En 86 juegos con los Medias Rojas esta temporada, está bateando .222 con seis jonrones. Su OPS de .599 sería el más bajo de su carrera.