La pandemia de covid-19 trastocó la dinámica del trabajo presencial e impulsó las actividades desde casa.
Hoy, cuando muchos países avanzan en un plan masivo de vacunación, algunos talentos conocieron los beneficios del home office y prefieren cumplir con sus funciones en línea, sin ir a la oficina.
GLOBOMIAMI conoció la opinión de Carlos Dorado, presidente de Italbank y vicepresidente de Italcambio, sobre lo positivo y negativo de evitar el trabajo presencial y qué productivo puede ser establecer metas organizacionales por internet.
Aseguró el empresario que habló desde su experiencia, todo es cuestión de responsabilidad y eficiencia.
“Desde el punto de vista de responsabilidad el hecho de cumplir un horario, de estar en un ambiente de trabajo, es muy positivo y las personas suelen ser más responsables cuando van a la oficina y cumplen un horario”, indicó Carlos Dorado.
No obstante, “desde el punto de vista de eficiencia, siempre y cuando la persona sea responsable, se es más eficiente en la casa, ya que no se pierde tiempo en los desplazamientos a los sitios de trabajo, en reuniones fuera de la oficina, en charlas de pasillo”, reflexionó.
Sobre el trabajo presencial solapado con la labor en remoto, manifestó que como todo proceso nuevo tiene sus puntos positivos y negativos, siendo una realidad que la pandemia aceleró el proceso y demostró también que se pueden ejecutar actividades desde la casa.
Es precisamente la conciencia la que nos distinguen de las máquinas
-¿Cambiar el trabajo presencial por el teletrabajo? ¿Podemos hacer un híbrido?
-Lograr ese equilibrio entre las cosas positivas de ambos procesos, y minimizar los negativos, sería una gran contribución al aumento de la eficiencia. Por lo cual, establecer días de trabajo desde la casa, con una medición de las horas dedicadas y el trabajo ejecutado, y estableciendo otro de presencia física, de contacto humano, de las reuniones viéndose los ojos, quizás pudiese ser una buena mezcla que se transformará en una mayor eficiencia.
-De ser así, ¿cómo controlarían las empresas el cumplimiento de actividades u horarios?
-La base es la responsabilidad, honestidad y eficiencia. Yo siempre digo que una persona no trabaja para una compañía, sino que trabaja para él, en una compañía; porque al final la profesionalidad dignifica a una persona, y un trabajo bien hecho, con profesionalidad y honestamente es una satisfacción personal muy gratificante. Por lo cual, si esa moralidad, y profesionalidad se cambia por la típica viveza, de hacer lo menos posible con el menor esfuerzo, es difícil que un software, o que una máquina pueda sustituir esa falta de pasión y motivación. Es un poco como el que pasa muy tiempo haciendo que estudia, pero no está aprendiendo nada. Tenemos las herramientas para saber cuándo una persona se conecta, qué labores desarrolla, qué tiempo pasa y qué tareas realiza, pero si falta esa pasión por lo que se hace, nunca se lograra un buen nivel de calidad.
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El trabajo presencial y remoto sí es posible
El presidente de Italbank y vicepresidente de Italcambio, Carlos Dorado, aseguró que quienes dirigen las organizaciones empresariales deben reinventarse, pues al final, las empresas están estructuradas por personas.
“El ser humano ha demostrado en toda su evolución una admirable capacidad de adaptación que siempre ha permitido satisfacer necesidades personas y colectivas.
Hoy se está en una fase posterior a la cuarta revolución industrial, que es la revolución del internet y del mundo interconectado”, explicó Carlos Dorado.
En ese sentido, la pandemia ha acelerado algunas transformaciones, entre las cuales se encuentra la Inteligencia Artificial (IA), que está evolucionando de forma exponencial, especialmente con la aplicación del “machine learning”, es decir, la capacidad de aprender de las máquinas.
“Se espera que en pocos años se llegará al “punto de Turing”, donde la capacidad de aprendizaje de las máquinas será mayor que la capacidad de aprendizaje del ser humano.
Las máquinas llegarán, por ejemplo, a reconocer el olor de una rosa, pero nunca podrán entender la reacción que provoca en el ser humano, porque carecen de conciencia.
Es precisamente la conciencia la que nos distinguen de las máquinas”, indicó.
-Entender lo que traerá esta revolución tecnológica, y las necesidades que creará, y las que eliminara en el ser humano y en el comportamiento colectivo; y saber anticiparse a esas necesidades con el uso de la tecnología necesaria, es algo en lo que debemos reflexionar todo el tiempo, todos aquellos que tenemos la responsabilidad de lograr que las empresas que dirigimos perduren en el tiempo.