Las autoridades sanitarias cubanas actualizaron este martes su balance de la pandemia con casi 3.600 casos de covid-19, un dato sin precedentes que se agrava especialmente en regiones como Matanzas, donde el régimen trabaja “con urgencia” para ampliar las capacidades hospitalarias y poder asumir así a más enfermos.
El Ministerio de Salud Pública de Cuba tiene registrados hasta el momento 210.913 positivos, 3.591 más que el lunes. Al menos 1.387 enfermos fallecieron, 15 más, mientras que 70 pacientes permanecen en estado crítico y otros 122 están graves, según los datos oficiales.
Esta ola de contagios llega a la isla cuando aún no se inicia la campaña de vacunación a gran escala contra la covid-19, si bien ya son casi 2,9 millones las personas que recibieron al menos una dosis de los dos principales fármacos desarrollados por investigadores locales.
Una de las características de esta nueva ola está en la expansión de los contagios, que ya no se concentran únicamente en grandes núcleos poblacionales como La Habana. En esta región se confirmaron este martes 591 nuevos casos, por detrás de Matanzas, donde se actualizaron los balances con otros 874 positivos.
LEA TAMBIÉN | Tormenta Elsa azota a Cuba tras dejar al menos tres muertos en el Caribe
“Ante el aumento de casos en Matanzas, también se trabaja con urgencia para habilitar nuevas capacidades hospitalarias”, prometió el líder del régimen cubano, Miguel Díaz-Canel, en Twitter. Así, anunció el envío de recursos personales y logísticos “para superar la situación epidemiológica más compleja del país”.
“Ningún territorio está solo en esta lucha que es de todos”, destacó Díaz-Canel, que siempre defendió la capacidad del sistema de salud cubano para hacer frente a la emergencia.
Entretanto, las autoridades también dan muestra de contención, lo que se traducirá por ejemplo en la suspensión del periodo de sesiones que tenía previsto celebrar la Asamblea Nacional Popular la próxima semana. El presidente del Parlamento, Juan Esteban Lazo Hernández, aludió en un comunicado a la “compleja situación epidemiológica” que atraviesa la isla.
