El mecanismo Covax, destinado a gestionar vacunas contra el covid-19 en países en desarrollo, tiene una “deuda” con Venezuela, dijo este domingo el líder del régimen venezolano, Nicolás Maduro tras acusar una demora en la entrega de dosis destinadas a cinco millones de habitantes.
“El sistema Covax tiene una deuda con Venezuela, así lo digo, Venezuela depositó hace tiempo, desde el mes de abril, los recursos y el sistema Covax le tiene que cumplir a Venezuela”, aseguró Maduro durante su acostumbrada alocución dominical en alusión a los 120 millones de dólares que el país debía pagar para concretar la compra.
Maduro añadió que su gobierno ha aportado “las indicaciones técnicas” al sistema Covax, codirigido por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y otros entes de Naciones Unidas, sobre las vacunas que pueden ingresar a Venezuela.
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Ciro Ugarte, director de Emergencias en Salud de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), oficina para las Américas de la OMS, dijo el miércoles pasado que Venezuela tenía aún “pendiente de pago 10 millones de dólares al mecanismo Covax”.
“Fuentes del país, a través de redes sociales y otros medios, anunciaron que se había completado el pago total. Todavía eso no podemos confirmarlo nosotros”, dijo en una rueda de prensa.
El gobierno busca adquirir, a través del Covax, la vacuna de Johnson & Johnson, de dosis única y que no requiere refrigeración extrema, pero ello dependerá de su disponibilidad, ha dicho la OPS.
“El sistema Covax tiene que garantizar en julio y en agosto varios millones de vacunas para ir completando las vacunas que conseguimos en el mercado internacional (…) y que también recibimos en donación, como hemos recibido”, sostuvo Maduro este domingo.
Venezuela tenía reservadas entre 1,4 y 2,4 millones de vacunas del laboratorio anglo-sueco AstraZeneca con el Covax, pero el gobierno vetó el fármaco basado en “informes técnicos” sobre sus efectos secundarios.
– Variante “británica” en Venezuela –
Venezuela, con unos 30 millones de habitantes, vive desde marzo una virulenta segunda ola que ha desbordado los centros de salud. Para el sábado sumaban más de 240.000 casos confirmados y unos 2.700 decesos, según cifras oficiales, cuestionadas por organizaciones como Human Rights Watch por considerar que existe un elevado subregistro.
Maduro confirmó este domingo la detección de una variante “británica” y otra “andina”, cuya propagación, afirmó, se produjo a través de la porosa frontera de unos 2.219 kilómetros que su país comparte con Colombia.
El gobierno amplió el pasado 29 de mayo su campaña de vacunación -que se inició en febrero con personal sanitario, autoridades y maestros- con miras a cumplir la meta de 22 millones de inoculados para diciembre.
Venezuela ha recibido hasta el momento las vacunas rusas Sputnik V y las chinas del laboratorio Sinopharm, y participa en ensayos de otra candidata de Rusia, la EpiVac Corona.
Ugarte indicó que hasta finales de abril “el país había vacunado a 364.000 personas”, de acuerdo con datos “de formularios conjuntos entre OPS, Unicef, que es alimentada por fuentes oficiales del país”.
Según la vicepresidenta del régimen Delcy Rodríguez un 11% de la población venezolana ha sido sido inoculada, aunque no existen cifras públicas sobre la cantidad de dosis aplicadas.
Fuente AFP