A 20 días del balotaje presidencial en Perú, los candidatos Pedro Castillo y Keiko Fujimori sellaron solemnemente este lunes su promesa de mantener la institucionalidad democrática si llegan al poder.
El maestro de escuela rural izquierdista y su rival derechista, hija del encarcelado expresidente Alberto Fujimori, juraron respetar 12 puntos contenidos en una “Proclama Ciudadana” redactada por las Iglesias católica y evangélica, entre ellos el respeto a los derechos humanos y no intentar buscar la reelección en 2026 (actualmente prohibida en Perú).
“La Proclama […] no determina un plan de gobierno, pero establece responsabilidades”, dijo el cardenal Pedro Barreto, al encabezar el acto en que ambos candidatos, con una mano en la bandera peruana, juraron respetar la institucionalidad democrática si ganan el balotaje del 6 de junio.
Tanto Castillo, un maestro de escuela rural, como Keiko enfrentan cuestionamientos de sectores que temen que puedan apartarse del sistema democrático.
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“Lo hago de todo corazón”, dijo al jurar Castillo, quien lucía su tradicional sombrero blanco de copa alta, típico de los campesinos de Cajamarca, su región natal en el norte de Perú.
El profesor dio la sorpresa al ser el más votado en la primera vuelta (18,9%) de los comicios, el 11 de abril, que tuvo un récord de 18 candidatos a la presidencia.
“Si el pueblo peruano me da la oportunidad, sé que podré también cumplir con mis promesas”, dijo por su lado Keiko (13,4% en primera vuelta), que afirmó que trabajará “para que los hermanos campesinos sientan que el Estado los ayuda”.
Ambos abanderados prometieron “respetar y defender el derecho fundamental a la vida y garantizar los derechos humanos de todos los habitantes”, así como preservar la libertad de prensa.
El 8 de mayo, las Iglesias católica y evangélica pidieron a ambos postulantes al balotaje que suscribieran esta proclama. Los dos lo hicieron antes de 48 horas, pero los promotores decidieron organizar un acto en un auditorio este lunes para que los candidatos sellaran solemnemente su compromiso.
La Proclama fue preparada además por la Asociación Civil Transparencia y la Coordinadora Nacional de Derechos Humanos.
El próximo presidente debe asumir el poder el 28 de julio en sustitución del mandatario interino Francisco Sagasti y tendrá como reto terminar con la inestabilidad política del último quinquenio, marcada por tres presidentes en cinco días en noviembre de 2020.