El gobierno de maduro nombró un nuevo c. n. e. al que define equilibrado, y por supuesto, a verraco no lo capan dos veces para creer que tal designación es buena cuando hace poco nombraron a una gentuza como miembros de la directiva del c. n. e. y que están desplazando ahora en esta nueva negociación, o sea los quitan y ponen como una pantaleta usada y los vendieron como “independientes” muy dignos, que no lo son.
Se habla de conversaciones políticas de cuyas intimidades no nos hemos enterado ni tengo porque enterarme, pero ningún dirigente opositor nos ha explicado a la inmensa mayoría opositora de este país lo que están haciendo. Es más, quiero saber que dice Henry Ramos o Julio Borges y María Corina sobre el particular y cuál es la legítima organización unitaria opositora para ponerme a su orden, si es que vamos a elecciones.
No quiero que venga en nombre de la oposición un tipo del grupo de Rosales, o alguien que uno no sabe si es chicha o limonada como fueron los últimos nombrados por maduro hace un año, que eran unos chavistas agazapados.
Nadie va a aceptar a unos payasos como felipe mujica, puchi, claudio fermin y compañía que son baila valses con el chavismo, o ni siquiera a Eduardo Fernández como representante de la oposición en las negociaciones, cuando es obvio que hay intereses de ellos por debajo de la mesa con el gobierno.
Es más, quiero saber de la vida de Henry Ramos, Leopoldo López y de Julio Borges que están callados sobre el tema, ni quiero que la negociación nos las venda un noruego o un sueco, que como negociadores políticos tienen la malicia de un recién nacido.
Es más, que la acepten políticos como el presidente Uribe que si es un verraco de verdad y que el sistema sea revisado por los mejores expertos posibles. Luego el problema no es solo de un c. n. e. equilibrado, sino que se dé el acceso a todos los medios de comunicación a la unidad opositora para hacer campaña electoral.
Lo exige un tipo como el suscrito que ha sido leal a la unidad opositora enfrentando también a los loquitos extremistas que creen que la luna es pan de horno y reclaman por utopías, pendejas.
Lo importante es la unidad de todos para salir de esto y no que cada dirigente por vanidad trate de sacar algún beneficio grupal porque Venezuela está herida de muerte y solo la actitud patriótica le es tolerable a cualquier dirigente opositor pues lo que vamos a elegir no son reinas de carnaval. Así que coman avispa porque cigarrón atora en esta decisión crucial.
Lo que sí le pediría a algunas instituciones sociales democráticas es que vayan reorganizando sus estructuras en base a dar respuesta adecuada en tiempo y espacio a un eventual torneo electoral.
El silencio del liderazgo opositor aturde.