La cancillería de Italia anunció “la expulsión inmediata” de dos funcionarios de la embajada rusa involucrados en un escándalo de espionaje entre ambos países, señaló un comunicado.

“Convocamos al embajador ruso en Italia y le comunicamos la firme protesta del gobierno italiano y notificamos la expulsión inmediata de dos funcionarios rusos involucrados en este grave asunto”, escribió en la red social Facebook el canciller italiano Luigi Di Maio. 

El ministro hizo referencia al arresto de un oficial de la marina italiana, sorprendido infraganti cuando entregaba documentos confidenciales a un militar ruso.

El oficial, capitán de fragata, fue detenido en flagrancia por delito de espionaje a favor de Rusia, en tanto celebraba una “reunión clandestina” con un ciudadano ruso el martes en la noche en Roma.

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Esta operación se hizo bajo la supervisión de los servicios italianos de inteligencia y del Estado Mayor de Defensa, de acuerdo con la explicación de las fuerzas del orden del país europeo.

El ciudadano ruso fue identificado como un militar de la embajada rusa en Roma y no fue oficialmente detenido por su condición de diplomático.

“Esperamos que el carácter positivo y constructivo de nuestras relaciones se mantenga y se preserve”, reaccionó el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, afirmando que la presidencia rusa “no disponía de ninguna información sobre las causas y circunstancias” de ese caso.

Este escándalo se produce en un momento delicado para las relaciones entre Rusia y Europa, ya que están tensas por la detención del opositor Alexéi Navalni y otros casos de espionaje.

El Kremlin acusó a la Unión Europea (UE) de tener una “posición conflictiva”, mientras que la UE culpa a Moscú de violar los derechos humanos, así como de frecuentes “ataques cibernéticos” contra los Estados miembros.