La economía de Panamá, una de las mayores de Centroamérica, sufrió una histórica contracción del 17,9% en 2020 sobre 2019, por los efectos de la pandemia, y espera recuperarse este año apoyada en la inversión y el consumo.
Se trata de una caída histórica, que supera la anotada en 1988, cuando el PIB de Panamá se derrumbó un 13,38 %. Además, superó el pronóstico de caída de 9 % del FMI y del 11 % previsto adelantado por la Comisión Económica Para América Latina y el Caribe (Cepal).
“Durante el 2020, la producción total de bienes y servicios en la economía panameña, medida a través del PIB, reflejó una contracción de 17,9 % con respecto al año 2019”, dijo la Contraloría General de la República, basada en cifras del Instituto Nacional de Estadística y Censo.
“Está considerada la cuarta mayor caída en el mundo. Panamá depende mucho de los servicios internacionales y esos servicios, al afectarse el mundo, se afectaron mucho. Eso hizo que la economía cayera fuertemente”, explicó a la AFP el exdecano de la facultad de Economía de la Universidad de Panamá, Rolando Gordon.
LEA TAMBIÉN: El reggae está de luto: falleció la leyenda Bunny Wailer
Lo que cayó
El comportamiento negativo “fue producto del desempeño de las actividades que se vieron afectadas al surgir la pandemia” de coronavirus en marzo, “situación que se prolongó durante los siguientes nueve meses del año”, explicó la entidad.
Las medidas de contención sanitaria limitaron a muchos sectores productivos, debido a la disminución de operaciones o cierre total, con suspensión indefinida de contratos de trabajo.
Los sectores más afectados fueron construcción, un rubro que suele representar el 15 % del PIB del país, que tuvo una caída del 52 % sobre 2019. También, como en todo el mundo, sintió el golpe el rubro hoteles y restaurantes (-55,8 %), en un país de alto flujo turístico
LEA TAMBIÉN: Miami inauguró centro de vacunación sin citas y para personas sin vehículo
Lo que resistió
No obstante, actividades relacionadas con la economía interna tuvieron comportamientos positivos, con incremento del número de empleados de la salud para enfrentar la emergencia sanitaria, dijo la Contraloría. Los servicios sociales y la salud privada crecieron un 4,7%.
También hubo un alza en minería (34,1%) y en agricultura (3%). En cuanto al rubro de transportes, si bien el sector también se resintió, contuvieron la caída las actividades del Canal de Panamá, importante vía de comunicación entre Atlántico y Pacífico. Hubo un incremento de 1,7% en los peajes y de 33,8% en los servicios prestados a las naves.
“Creció la agricultura porque había que producir alimento. Si bien los puertos siguieron funcionando y tuvieron números positivos, no generan grandes ingresos a la economía nacional”, explicó Gordon.
Hora de recuperarse en Panamá
Panamá, que ya inició las vacunaciones contra el covid-19, ha retomado gradualmente sus actividades económicas. Cepal prevé un crecimiento de 5,5 % para 2021, mientras que el FMI considera que estará en torno de 4 %.
Pero para el economista y profesor universitario Felipe Argote, ya desde 2019 la economía de Panamá venía desacelerada.
“El gobierno debe hacer énfasis en la demanda, sin dejar de salir de la oferta. Tienes que financiar a las empresas para que no quiebren, darle incentivo a la pequeña y mediana empresa, pero tienes que ponerle plata en el bolsillo de la gente”, consideró Argote.
El gobierno apoyó a desempleados con un bono mensual de 100 dólares. Pero Argote considera que el bono podría ser de 300 dólares, además de una reducción en el impuesto al consumo.
“Si no hay consumo es porque no hay dinero ni trabajo. Y si no hay trabajo es porque no hay inversión y las empresas no van a invertir así por así. La inversión extranjera cayó fuertemente”, detalla Gordon, por su parte.
Fuente: AFP