El presidente electo Joe Biden se vacunó este lunes contra el covid-19, en un evento público y transmitido por televisión para motivar a la población a confiar en la vacuna.

La inyección de la vacuna Pfizer/BioNTech, el primero de los dos inmunizantes ya autorizados en Estados Unidos, le fue aplicada en un hospital de Newark, en Delaware. 

Biden aseguró a los estadounidenses que no hay nada de qué preocuparse cuando se vacunen, y que mientras tanto, deben seguir usando máscaras y escuchar a los expertos.

La futura primera dama, Jill Biden, también recibió la primera dosis de la vacuna este lunes, y la futura vicepresidenta, Kamala Harris, hará lo propio la próxima semana, según el equipo de transición gubernamental.

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Cuando asuma el cargo el 20 de enero, Biden se convertirá en el presidente de edad más avanzada de la historia de Estados Unidos. Para entonces, debería haber recibido la segunda dosis de la vacuna, necesaria para obtener inmunidad.

Biden elogió a “los científicos y trabajadores de primera línea, gente que fue la que realmente hizo el trabajo clínico” para poder lograr la campaña de vacunación.

El demócrata también pronunció elogios poco comunes para el Gobierno del presidente en funciones, el republicano Donald Trump, al considerar que merece crédito por supervisar el desarrollo y la producción de vacunas a una velocidad récord.

“Pienso que el Gobierno merece el crédito por la operación Ward Speed. La gente debe estar preparada para recibir la vacuna. No hay nada de qué preocuparse”, señaló.

Biden, que demostró un estricto cumplimiento de las normas sanitarias durante su campaña y desde su elección en noviembre, prometió hacer de la lucha contra la pandemia su máxima prioridad, con una campaña de vacunación sin precedentes, pero también una vigorosa defensa del uso de máscaras.

El vicepresidente saliente, Mike Pence, fue vacunado el viernes, también en público, junto con varios altos funcionarios del Congreso estadounidense. 

Sin embargo, Trump aún no ha anunciado una fecha para su vacunación.

El presidente fue contagiado de covid-19 a principios de octubre, y tuvo que ser hospitalizado durante tres días.

Entonces, recibió varios tratamientos para combatir el virus, por lo que su equipo médico cree que aún no es conveniente que el republicano reciba la inmunización.

Con información de la AFP.