Los vendedores por cuenta propia en El Salvador ya cuentan con un estatus de formalidad a fin de lograr fuentes de financiamiento y poder invertir.
Hoy, ya están legales ante el Firempresa (Fideicomiso para la Recuperación de Empresas Salvadoreñas) y cuentan con un programa de $100 millones.
Este grupo de ‘comerciantes informales’ dan un aporte significativo a la economía de El Salvador, al consumo de diferentes productos y servicios e incluso genera empleos.
El presidente Nayib Bukele prevé entregarles ayudas a fin de que no dependan de prestamistas, que le cobran altas de interés para tener acceso a un capital.
“Los comerciantes por cuenta propia pagan sus préstamos al 7000 % anual, es algo increíble y que no puede suceder, por eso les apoyaremos, de forma decidida, no como lo decían anteriores administraciones”, dijo Bukele.
La tasa tasa de interés de esta parte del fideicomiso es del 3 % anual, cifra que es mucho más competitiva y favorable que la banca formal y sus múltiples requerimientos, que no son de acceso para los vendedores por cuenta propia, explicó el mandatario.
El componente del Firempresa es para aquellos que no tienen inscripción formal en el Centro Nacional de Registros (CNR) o en el Ministerio de Hacienda y se convierte en un pilar para ir dando pasos significativos hacia la formalidad de estos negocios, lo que ayudará a aumentar la base tributaria, elevar la recaudación y modernizar los tejidos económicos del país, entre otros aspectos.