Un informe de Human Rights Watch (HRW) afirmó que, en medio de la pandemia y el estado de alerta decretado por el régimen de Nicolás Maduro el 13 de marzo, aproximadamente 130.000 ciudadanos han retornado al país. Según la organización, gran parte de estos resultaron afectados por el impacto económico de la crisis de salud en los países donde se encontraban.
El régimen acondicionó varios centros para que las personas cumplieran la cuarentena antes de continuar el camino hacia sus hogares y de esa manera evitar que el virus se propagará si estos llegaban infectados. A pesar de esto, según el informe presentado este martes 13 de octubre por HRW y el Centro Johns Hopkins, en muchos de estos espacios se registró un ”trato abusivo” contra los retornados.
El informe basa sus argumentos en entrevistas a más de 20 retornados, que se alojaron en un total de 26 de estos centros y en testimonios de periodistas y representantes organizaciones humanitarias.
Federación farmacéutica: “Se entregó nuestra autonomía a otros países”
En el documento se expresa que las condiciones en los centros varían considerablemente, porque ”no se aplica ningún estándar común a todos”.
Además denuncian la insalubridad y aglomeración en muchos de ellos, lo que incumple el objetivo principal de los centros y en su lugar, podría incrementar la transmisión del virus covid-19 en el país.
Kathleen Page, doctora y académica de la Facultad de Medicina de la Universidad Johns Hopkins, afirmó que en estos centros ”es imposible cumplir con las medidas de distanciamiento social”. Sostuvo que ”exigirles quedarse allí por más del plazo establecido de 14 días no hace más que agravar el riesgo de que se contagien y no contribuye a ningún propósito razonable de salud pública”.
El informe afirmó que gran mayoría de las personas permanecieron más tiempo de los 14 días recomendados por la Organización Mundial de la Salud. Esto debido a las ”demoras en las pruebas de diagnóstico de covid-19 y a un protocolo de testeo innecesariamente complejo”.
El reporte además, destacó que en estos centros hay una grave escasez de alimentos y medicinas. Asimismo, señaló que las protestas de estos migrantes retornados fueron silenciadas bajo amenaza de ser detenidos.
El principal líder del régimen venezolano, Nicolás Maduro, dijo que ha conversado sobre la situación de los retornados con la Alta Comisionada para los Derechos Humanos de las Naciones Unidas, Michelle Bachellet.
Fuente: CNN en español / Osmary Hernández