La carta de crédito es aquella que otorga un banco emisor, por medio de instrucciones de su cliente (ordenante), de pagar una cierta cantidad de dinero a una empresa o persona (beneficiario), a través de uno de sus corresponsales (banco notificador).
Pero, para que esto ocurra, se deben cumplir con ciertos requisitos entregados en un fecha indicada. La carta de crédito significa que el banco ofrece su dinero en sustitución al del cliente.
Este instrumento financiero es un crédito documentario, en el cual el beneficiario podrá girar sobre la misma mediante la presentación. Se tratan de documentos que además dejan claro el embarque de las mercancías y el cumplimiento de cualquier otra formalidad exigida por el tomador (importador) de la carta de seguros, planilla, consulares, entre otros.
La carta de crédito comercial internacional genera una triangulación en la que uno o más entidades financieras sirven para el pago del precio, mientras que la transferencia de las mercancías sigue siendo una relación directa entre el exportador y el importador, pero en la cual el banco garantiza al importador que sólo pagará si el beneficiario presenta los documentos (certificación de embarque, facturas comerciales, etc.), permitidos en la carta de crédito.
Con información de Comercio Internacional
