Gregory Haasze, un hombre detenido la semana pasada en Boynton Beach, en Palm Beach, por fabricar y detonar bombas en lugares públicos, fue encontrado muerto en su celda el sábado.
Haasze, quien al ser detenido aseguró que jamás intentó lastimar a alguien con sus bombas caseras, fue hallado colgado con una sábana rota en horas de la noche.
Los médicos no lograron reanimarlo y lo declararon muerto poco después. Sobre el hombre pesaban 26 delitos estatales por fabricación, posesión y colocación de un dispositivo destructivo. Además, se le impuso una fianza de 130 000 dólares.
Con información de la AP.